¿POR QUÉ ECUADOR SE OPONE A LAS FUMIGACIONES EN LA FRONTERA?

La oposición del actual gobierno y del electo presidente Correa a las fumigaciones en la frontera norte dentro de la franja cordada de diez kilómetros, no puede ser más que consecuente con los intereses del Estado y pueblo ecuatoriano.
Ya no es un secreto para nadie que el Plan Colombia no es la iniciativa de Paz de Pastrana formulada en 1998, sino que ha variado sustancial y adjetivamente en correspondencia a los interese norteamericanos y su estrategia de seguridad nacional. La política exterior de EUA hacía América Latina se concreta a tres puntos centrales: la lucha contra el narcotráfico, la promoción de la estabilidad de la región que incluye la lucha contra los grupos subversivos; y, por último, la estrategia comercial que más que comercial es geopolítica para mantener control en la región.
El conflicto armado y la violencia es, sin duda, un problema real en el vecino País, lo contradictorio es que el Plan Colombia y con él las fumigaciones no han promovido el proceso de paz, al contrario lo han estancado y en cuanto a las plantaciones de coca, lo que se ha logrado es desplazarlas hacia otras regiones.
Elsa Nivi señala que, el problema no es tanto el glifosato en si mismo sino los químicos que componen el Roundup, compuesto con el que se lo mezcla para las fumigaciones, lo que provocaría efectos como los siguientes: Daños a la salud de los habitantes, animales y cultivos de frontera (Acción Ecológica detectó síntomas de intoxicación en el 100% de personas residentes en zonas de frontera en una franja de 5 Km y de 89% en una franja de 10 Km a las fumigaciones) A esto se suma el riesgo de crisis humanitaria por el desplazamiento de colombianos, división en los sectores políticos ecuatorianos, limitación de la soberanía nacional, alto riesgo de regionalización o internacionalización del conflicto, inseguridad social, derivada de acciones delictivas que avancen a sectores urbanos, resentimiento en la población fronteriza; asignación deficiente a los sectores fronterizos, ineficiente desarrollo productivo, entre otros.
Ecuador tiene derecho a oponerse a las fumigaciones debido a los impactos ambientales, sociales, económicos y de seguridad que estos ocasionarían.
Por: Melania N. Carrión (Artículo publicado en "Diario La Hora", diciembre de 2006)
mcarrion@uasb.edu.ec